Soñar: en realidad, o en la aplicación de realidad, es cuando duerme y su mente crea imágenes y una cuenta de su pensamientos (si son verdad, o no). Sin embargo, soñar puede también ser esperar algo. Y, en un caso extremo, soñar es tomar sus imágenes y tratar de ponerlas en el mundo real. No querer esta vida, sino un mundo más como el que se encuentra en la cabeza.
Vivir: ver la vida en su totalidad. Todos tenemos sueños y queremos ver la vida lo mejor o lo peor de lo que es. Pero, necesitamos ver a la vida en desesperación o exuberancia. Eso es lo trágico de los humanos: no podemos ver toda la vida, y así no podemos juzgar la vida como mala o buena. Aquí está, en mi opinión, la parte de vivir más difícil: para vivir, necesitamos aceptar lo que no podemos saber, y no permitamos controlar nuestras vidas.